sábado, 26 de enero de 2008

José Luía Garcés González

Una vida para la narrativa


José Luis Garcés Gonzáles es un escritor y ensayista colombiano nacido en Montería, Córdoba, el 28 de agosto 28 de 1950. Miembro fundador del grupo literario El Túnel. Actualmente dirige la revista y el periódico del mismo nombre.
Garcés Gonzáles Ha publicado cuentos, poemas, crónicas, investigaciones literarias y estudios monográficos. Su obra literaria ha sido reconocida tanto en Colombia como en el exterior. Algunos de los galardones que ha recibido, son: Segundo premio Plaza y Janés, 1985, con Entre la Soledad y los Cuchillos; Primer premio de Novela Ciudad de Pereira, 1984, con Carmen ya Iniciada. Primer premio al Mejor Envío Extranjero, Concurso de Cuentos Javiera Carrera, Valparaíso, Chile, 1983.
En 1992, con motivo de los 500 años de América, logró el tercer premio en el concurso de historia, Universidad del Atlántico, con el ensayo Dos Lujurias en América. Su libro de cuentos Fernández y las Ferocidades del Vino, ganó el segundo premio en el concurso nacional del libro de cuento Ciudad de Bogotá, en 1991. A finales de febrero de 2007 obtuvo el Premio Nacional de libro de cuento de la Universidad Industrial de Santander con el volumen “Aguacero contra los Árboles”

Obra Literaria
Oscuras cronologías (cuentos, 1980).
La efímera inmortalidad de los espejos (cuentos, 1982).
Los extraños traen mala suerte (novela, 1982).
Entre la soledad y los cuchillos (novela, 1985).
Balada del amor final (cuentos, 1986).
La llanura obstinada (novela, 1988).
Carmen ya iniciada (novela, 1988).
Corazón plural (poemas, 1989).
Fernández y las ferocidades del vino (cuentos, 1991).
Cuerpos otra vez (textos poéticos, 1993).
Zahusta (cuentos, 1995).
El abuelo Bijao y otros cuentos de lao (cuentos infantiles, 1996, 2007).
Crónicas para intentar una historia (crónicas, 1998).
Los locos de Montería (investigación, 1999).
Isaac (novela, 2000).
El abuelo Bijao ha regresao (cuentos infantiles 2002, 2004).
Literatura en el Sinú (investigación, dos tomos, 2000). 18. Manuel Zapata Olivella, caminante de la literatura y de la historia (investigación, 2002). 19. Cultura y Sinuanología (investigación, 2002). 20. La vida (cuentos cortos, estampas, viñetas, 2004). 21. Ese viejo vino oscuro (novela, 2005).
22. Literatura en el Caribe colombiano. Señales de un proceso (investigación, 2007)

David Sánchez Juliao

Innvador de la literatura colombiana

Prestigioso escritor colombiano, autor de cuentos, testimonios, fábulas, ensayos, novelas y guiones de televisión que se caracterizan por divulgar las tradiciones y la cultura popular. Nació en Lorica en 1945. Estudió Sociología en la Universidad Simón Bolívar de Barranquilla, y desde entonces ha combinado la publicación de sus libros con la actividad docente.
Fue profesor de literatura colombiana en la Universidad de América de Bogotá, y en la Universidad de Córdoba; de literatura y política en Colombia en el Center of Intercultural Documentation de Cuernavaca en México; profesor visitante del Departamento de Lenguas Extranjeras de Antioch College en Estados Unidos; coordinador del área de Ideología y Cultura del Instituto Cooperativo Interamericano en Panamá; ha dictado toda suerte de talleres y cursos de literatura y cultura en Colombia, Panamá, México, Honduras y Estados Unidos, al igual que conferencias en múltiples universidades de América, Europa y Asia.
También ha desempeñado cargos diplomáticos, entre ellos embajador de Colombia en la India (1991-1993) y en Egipto (1995-1996).
Entre sus libros se cuentan ¿Por qué me llevas al hospital en canoa? (1974); Historias de Raca-mandaca (1975); El arca de Noé - fábulas (1976); Cachaco, Palomo y Gato ? novela (1977); Nadie es profeta en Lorica - cuentos (1978); El Pachanga, El Flecha, Abraham Al Humor - cuentos (1981); Pero sigo siendo el rey - novela (1983); Mi sangre aunque plebeya - novela (1987); Buenos días, América - novela (1988); El Cacique y la Diosa - historia para serie de televisión (1989); El país más hermoso del mundo - relato para niños (1989); Aquí yace Julián Patrón - relato (1989). Sus obras han sido traducidas al griego, chino, holandés, alemán, hindi e inglés. Algunas distinciones recibidas por su trabajo incluyen el Premio Nacional de Libro de Cuentos (Bucaramanga, Colombia, 1977) por Nadie es profeta en Lorica y otros cuentos. El Premio de Novela Plaza y Janés con Pero sigo siendo el Rey (1983). Los premios India Catalina a las producciones para televisión Pero sigo siendo el rey y Gallito Ramírez basadas en las obras homónimas (1984, 1986). Y el Premio Internacional Dulcinea otorgado por la Asociación Miguel de Cervantes de Barcelona, España (2000).

Nacha Newball Jiménez

Combina los enfermos con la poesía

Poeta y Enfermera, Especialista en Gerencia en Salud y Gestión Pública, Diplomada en: Auditoria, Gerencia y Mercadeo en salud, Prevención de la Enfermedad y Promoción de la Salud ; con más de diez (10) años de experiencia en el sector salud público y privado en el desarrollo de proyectos de salud, implementación de acciones de PAB y de Prevención de la Enfermedad y Promoción de la Salud correspondientes al 4.01 de la UPC –S y asesoría en política pública en salud al Consejo Distrital de Seguridad Social en Salud.
Mucha parte de su vida la pasado entre medicamentos, enfermos hospitales y libros.
Ha publicado los siguientes libros:
“ Poemas de Amor”, 1999
Página web “Poemas de Amor”, 2000
También ha colaborado en diferentes medios, entre ellos “El Periódico de la Costa” y “Magangué Hoy”..
“Participación social, modelo de desconcentración y descentralización en Salud”.
“Soy líder Comunitario”.
nachanewball@gmail.com

Carmencita Delgado de Rizo


Tras las melodías del Bolero

Investigadora, poeta, bolerista, recopiladora y ama de casa, natural de Cartagena (17 de junio de 1936).
Estudió primaria y bachillerato en Cartagena y Comercio en los Estados Unidos. Dirigente cívica, su nombre se encuentra en las placas de muchas organizaciones sociales.
Es autora de los libros “Cancionero” – Más de mil canciones para recordar-, “Más de mil poemas y canciones para la Mesita de Noche” y “Gotas de Sentimientos”.

Isis Buelvas de León

Buscando el poe qué de la Investigación

Ensayista, escritora, conferencista y docente y una de las más importantes figuras de la investigación y de la epistemología bolivarense y de la Facultad de Medicina de la Universidad de Cartagena, ciudad donde nació en el año de 1957.
Autora de varios libros de investigación, entre ellos “Ciencias Sociales y Desarrollo Social”, “La otra dimensión del desarrollo humano”, obra con la que obtuvo el Primer Puesto en la modalidad de Ensayo del Proyecto Editorial del Distrito en coautoría con el también ensayista Fernando Fernández.
Otras obras del mismo corte científico son “Conflictos presente en el proceder del investigador principiante” y “Antes de la Investigación”.

Fernando Fernández



La búsqueda de una narrativa de corte intelectual

Escritor, cuentista, novelista, ensayista e investigador de corte epistemológico con propensión a un existencialismo sesgado hacia el trascender y el absurdo. Docente y Magíster en Administración de Procesos Educativos. Estudios de Filosofía y simultáneas cogniciones en Hermenéutica y Epistemología.
Aún no se ha apropiado de la esencia reinante en el Proceder Histórico, pese a que ya ha intimidado con la Estética de la Teoría de la Acción Comunicativa. Nació en Cartagena (30 de mayo de 1954), pero mucha parte de su infancia la vivió en Curumaní, sintiendo en los amaneceres ráfagas de brisas frescas que bajaban de la sierra del Perijá.
Es autor de las novelas “En afinidad con la muerte”, “Entre intuiciones, sonrisas y orgasmos”, “Abandonando la niñez”, “Regalos navideños y cosas extrañas”, “Meditante de medianoche”, “Thur”.
Y entre sus libros de cuentos están “Patrulleritos de la Razón”, “Historias futuristas para personas pensantes” y “La Realidad”. Ha escrito los ensayos “Más de diez verdades sobre la Latinoamérica maldita”, “Novelistas o administradores”.

Germán Espinosa

Una de las grandes figuras de la narrativa y la poesía colombiana

 
Nació en Cartagena el 30 de abril de 1938. Desde muy joven viajó a Bogotá, ciudad donde murió el 17 de octubre de 2008. Escritor precoz, a los 15 años publicó su primer libro, de versos eróticos, por lo cual fue expulsado del Colegio Mayor del Rosario. Periodista, editor, traductor, poeta, dramaturgo, cuentista y novelista. Se casó con la pintora Josefina Torres.
Casado con la pintora Josefina Torres, su novela La tejedora de coronas (1982) fue incluida por la UNESCO en su lista de obras patrimonio de la humanidad. Esta extensa obra, narrada por una mujer ficticia llamada Genoveva Alcocer, transcurre en el siglo de las luces, en un escenario típicamente histórico, en Europa, Estados Unidos y algunas islas del Caribe.
Entre sus obras destacan además, Letanías del crepúsculo (1954), La noche de la Trapa (1966), El Basileus (1965), Los cortejos del diablo (1970), Anatomía de un traidor (1973), Claridad subterránea (poesía, 1974), Reinvención del amor (poesía, 1974), Los doce infiernos (1976), El magnicidio (1979), El signo del pez (1987), Noticias de un convento frente al mar (1988), Sinfonía desde el Nuevo Mundo (1990), La liebre en la luna (1990), Libro de conjuros (1990), La tragedia de Belinda Elsner (1991), Los ojos del basilisco (1992), La lluvia en el rastrojo (1994), Canciones interludiales (1995), Obra Poética (poesía, 1995), El naipe negro (1998), Lino de Pombo, el sabio de las siete esferas (1998), Cuentos completos (1998), Crónicas de un caballero andante (1999), Romanza para murciélagos (1999) y La balada del pajarillo (2000).
Su ciudad natal Cartagena de Indias, ha servido de marco a varios de sus cuentos y novelas, ha traducido libros del francés al castellano, entre ellos El barco ebrio de Arthur Rimbaud, y fue cónsul colombiano en Europa y África.

Gustavo Iabrra Merlano


Un devoto de la bella poesía

Gustavo Ibarra Merlano, nacido en Cartagena de Indias en 1919, se inició en la lectura de los clásicos españoles, el descubrimiento exaltado de Garcilaso y la Generación del 27, en el Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario en Bogotá.
Su devoción de asceta y su pasión por la cultura griega, lo llevaron a descifrar a los trágicos griegos, los poetas del Siglo de Oro español y a algunos autores católicos, como Kierkegaard y Paul Claudel. En aquella Bogotá dormida , lluviosa y virreinal, como la atmósfera de aquellos versos, el joven lector conoció luego en la Normal Superior, al director del plantel, el escritor y psiquiatra José Francisco Socarrás, quien convirtió la Normal Superior en una constelación de inteligencias, como el americanista Paul Rivet, José Francisco Cirre, profesor español experto en la Generación del 27, y Pedro Urbano González.
Discreto y esencial, Ibarra Merlano, el mayor de cinco hermanos, estudió Filología y Derecho en la Universidad La Gran Colombia, de Bogotá, y ejerció su profesión en el ramo de aduanas. De regreso a Cartagena fue suplente en la cátedra de Grecia que dictaba el Padre García Herreros en el colegio San Pedro Claver. De aquellas clases de griego en el año 1948, uno de sus alumnos, el poeta Félix Turbay, recuerda la erudición sensitiva de Ibarra y la estatura espiritual de "un ser excepcional que entraba al colegio San Pedro Claver, y en cinco minutos, entraba ya a tu alma. Se posicionaba con su finura intelectual y su ternura, en el corazón de sus alumnos, nos leía fragmentos de poemas, y se involucraba de una manera mágica en la vida de sus estudiantes. No auscultaba conciencias sino soledades humanas".
"Siempre estábamos estudiando a Sófocles en Cartagena. Me interesaba y me atraía considerablemente la tragedia griega, la mitología y la filosofía griega. Pero mi sueño en verdad era ir a Grecia. Fue un sueño tardío pero hermoso que cumplí después de los 60 años. Los sueños retardados son mejores". En ese viaje de cuatro meses de deslumbramiento y de reencuentro con los paisajes y atmósferas que estaban en sus lecturas de toda la vida, reconoció un alto espíritu de la amistad, y, de igual manera, un deslumbrante espíritu poético entre los atenienses. "No salí de Atenas. Mi sorpresa en Atenas fue la Acrópolis, la cultura preclásica, que es tan grande, menos atrapada en la reja nacional y cartesiana. Está asistida por un vigor mítico. Tengo en estos tres libros: "Hojas de Tarja", "Los días navegados" y "Ordalías", obsesiones griegas que, a la postre, son obsesiones de todo lo humano. Hay un poema que se llama "La Torre de los Vientos". La Torres de los Vientos es un reloj hidráulico construido por el astrónomo andrónico en el siglo I antes de Cristo, y cuyos despojos aún se admiran en Atenas. Me impresionaron los vientos esculpidos, su intacta presencia en el tiempo".
En las páginas del Libro de Buen Amor, Ibarra Merlano estudió el concepto de amor en la literatura española, "el amor trágico en Calixto y Melibea y los conceptos de amor platonizante de León Hebreo en el Siglo de Oro. También indagó en los antecedentes de ese amor en la literatura griega, en los trágicos, tratando de hallar las características peculiares del desarrollo de sus personajes, que aunque eran los mismos en cada uno de los autores, de acuerdo con el mito, sin embargo tenían resonancias diferentes, tratamiento dramáticos diferentes, en donde se ponían de manifiesto, más que cualquiera explicación preceptiva, el temperamento dramático de Sófocles, el de Esquilo, el de Eurípides. Esas lecturas comparadas fueron las que permitieron acercarme a "La hojarasca" en una forma que Gabriel pudo ver con qué amor había sido recibida en medio de la cepa clásica, especialmente de Sófocles. Como resultado de esos estudios escribí un ensayo denominado "Concepto de honra y gracia en el Siglo de Oro español".
Con su modestia congénita, Ibarra Merlano confiesa que animó a García Márquez a leer las tragedias griegas. "Pero Gabriel no necesitaba de lecturas. Era un hombre nutrido de sus fondos propios, poseedor de una gran cultura novelística. Rojas Herazo, Clemente Manuel Zabala y yo, girábamos alrededor de la poesía. Recuerdo que Zabala vibraba, literalmente, con la poesía. Cuando algo le gustaba se sacudía la guayabera con la mano en el pecho".

El inicio poético
Los primeros poemas de Gustavo Ibarra Merlano aparecieron a principios de la década del cuarenta en la página "Lunes Literario", que dirigía el poeta José Nieto, en el diario conservador El Fígaro, que dirigía Eduardo Lemaitre, y en donde se creó el grupo Mar y Cielo, resonancia caribe del grupo Piedra y Cielo. "Nosotros no tuvimos ninguna influencia de Piedra y Cielo. Ni siquiera los conocíamos", dice José Nieto. "Mucho tiempo después, conocimos al poeta Jorge Rojas, de Piedra y Cielo, en los astilleros de El Arsenal. Cada vez que llegaba un poeta a la ciudad lo llevábamos donde Tito de Zubiría, que vivía en la Calle de la Moneda". Algunos de los textos del poeta Ibarra Merlano aparecieron con el seudónimo de Juan Maretta.
El capitán de ese convite de enviciados por la literatura era el poeta Jorge Artel, y en él participaban José Nieto, Jacinto Fernández y Gustavo Ibarra Merlano. Sin desdeñar la mirada enjuiciadora del poeta Luis Carlos López, los maricielistas buscaron una lírica con metáforas ingeniosas y excesivas, un intimismo marino y una cadencia evocativa de la poética española.
"El joven que yo evoco ahora después de sesenta años, era ya un Gustavo Ibarra Merlano de una extraordinaria erudición griega, era un gran conversador y un hombre que tenía pocos amigos", confiesa José Nieto, quien le publicó los primeros poemas en Lunes Literarios. José Nieto, reconoce que la lámpara de ese núcleo humano de escritores jóvenes congregados en la sede del periódico El Fígaro, en la Calle Don Sancho, de Cartagena, a principios de la década del cuarenta, era el poeta Jorge Artel. Animado por Artel, los jóvenes Ibarra Merlano y José Nieto publican sus primeros poemas.
Nieto reconoce que "Artel vio los primeros poemas que escribí y me animó a seguir escribiendo". Aquellos versos se publicaron en 1949 en un pequeño libro de poemas titulado El viento entre las jarcias, en ediciones Espiral Colombia. Lo mismo ocurrió con Gustavo Ibarra Merlano.
En un diálogo en el diario El Universal, el poeta Ibarra Merlano confesó que "yo siempre he tenido desde mis 18 años, un pudor virginal y desconcertante por publicar poesías. Para mí la poesía es una síntesis diamantina. "La Cartagena de 1940 cuando el grupo de El Fígaro, iluminado y presidido por el poeta Jorge Artel. Allí estaban Donaldo Bossa Herazo, Héctor Rojas Herazo, que tuvo una relación de amistad con el grupo, y José Nieto. Jorge Artel y Donaldo Bossa eran las cifras mayores de esa época, poéticamente hablando".
"Artel promovía y animaba con fervor a los jóvenes poetas. Donaldo, un poco más introvertido constituía en esos años, otra cifra importante de la poesía cartagenera. Artel fue el que miró mis primeros textos. A mí no me gustaba hablar con jactancia de poesía. Yo hablo de textos y no de poemas. El me animó a seguir trabajando en ese territorio. La otra época, la de 1948, estuvo integrada y animada por Clemente Manuel Zabala, un maestro tácito y una gran cifra humana".
Aquellos dos instantes culturales: 1940 y 1948, entre El Fígaro, en la Calle Don Sancho, y El Universal, en la Calle San Juan de Dios, en el corazón amurallado de Cartagena, señalaron el destino cultural de la Cartagena de mitad del siglo XX, en la mirada de Ibarra Merlano.
Entre la docencia, la complicidad de sus amigos escritores, los días de siembra en una finca de Ternera, Ibarra Merlano siguió estudiando la literatura griega.



El baldío La estructura del baldío con su hormiguero,
su hoja podrida en cierta rama,
su corteza de totumo entrañable
y su hormiguero caminante
lleno de intermitencia y detritus.
Un pueblecillo de entes negros
repliega su red sobre desechos montículos.
Venas de hojas muertas, lacerías de tragacanto,
Este es el baldío.
Agua silbante. Alto cocotero.
De la carcoma a la tierra que se despliega en la mano
con eterna sombra y espanto.
Total, suspendido.
En el patio había una mina,
había una mina de donde salía el tiempo.
Costas desiertas, bravías estructuras
de sal y roca, frente al mar incesante.
Aquí está el poema, mi palpitación segura
debajo del círculo de dureza.
Alzo mis ojos hasta el cielo de alarido
y cornamusa.
Como si fuera un extraño, en medio de estas durezas,
todo sigue siendo solo a pesar mío.
Después cuando a través de la música entera
ingresamos al baile, ¡dale negra!
En medio de los cobres punzantes.
Al baile ritual y áspero marchamos
como a una dura faena.
Libramos la batalla con clarines y tambores.
He aquí mi lenguaje tranquilo,
mi mugido de ingreso al tiempo.
Hojas claras de mango, hojas frescas de almendro,
en forma de vago ángel que oscila.
Zumo del clemón, calumnioso y horrendo,
abundancia color de gabán.
En la mitad del grito estalló el caimito,
que se inmola en el aire
como la pulpa misma de un secreto
que se enmohece fuera de sí.
La opulenta entraña de los totumos.
Congregación de suma dureza en la cañafístula
con su ungüento doloroso,
casi miel y casi podre
a medio morir entre profundos crótalos.

La hoguera descorrida He mirado el viento en el parque
amarillento y lejano
filtrarse en la enumeración de las hojas,
y la piedra de la iglesia
cantar en la aspersión de su onda dilatada,
y unir mi corazón al espacio total.
Sin pensar en nada he visto
el alumbramiento del tiempo.
Y una voz certera reunida
en el instante.
Tiempo de morir, de ver en el parque
la llama poderosa que consume.
Y volverme súbita pavesa
en la hoguera descorrida.
Profundidad del instante,
cayendo del límite del día al corazón,
plegándose en el vidrio
del transcurso,
al filo del alma,
al calor, a la voz,
Oh marea definitiva, te he visto
hundiéndome, hundiéndolo todo,
como un río por debajo de las cosas estables,
socavar la entraña del día,
en el gran naufragio del aroma y
la voz

Diana Pedrosa Cadena

Poeta que combina versos y melodías

Poeta, investigadora, ensayista, docente y pianista colombiana. Nació el 21 de abril de 1965, en Barranquilla, la ciudad más alegre de Colombia, conocida como la “Arenosa” o “Puerta de Oro de Colombia”.
Sus estudios primarios y bachillerato los realizó en el Colegio de Nuestra. Sra. Del Buen Consejo, de donde egresó en el año de 1982. En 1990 obtuvo el título de Licenciada en Educación Musical de la Universidad del Atlántico. Especialista en Literatura del Caribe Colombiano. Candidata a Doctorado. Magistra en Educación Pontificia Universidad Javeriana en convenio con la Universidad del Norte, 1997.
Actualmente es Profesora de Piano de la Universidad del Atlántico. También fue docente en la Universidad del Norte, en el Instituto Experimental del Atlántico “José Celestino Mutis”, y en el Instituto de Lenguas Modernas.
Ha participado en diferentes congresos y seminarios de Literatura y de Investigación Literaria.
Ha participado en conciertos y presentaciones que incluyen la Biblioteca Luis Ángel Arango, la Universidad Antonio Nariño y Universidad Incca en Bogotá, además de presentaciones en el Concierto del Mes, Comfamiliar del Atlántico, Universidad del Norte y otras instituciones en su ciudad natal.
También ha adelantado investigaciones, unas veces a nivel individual y otras veces como autora, además de orientar tesis a alumnos de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad del Atlántico.
Desde el año 1996 viene siendo invitada a dictar charlas, conferencias en universidades y escuelas de Barranquilla.
Ha escrito artículos y ensayos para revistas y periódicos de la Costa Caribe colombiana. Además, ha sido invitada a reseñar libros de diferentes autores y temas.
Ha recibido reconocimientos y condecoraciones, entre las cuales se destaca el de COLCIENCIAS en Octubre de 2005 y reconocimiento en Argentina por su participación en Antología con el poema Oda a la Soledad, en diciembre.2005.
Ha publicado los siguientes libros:
1. Ensayo sobre autores del Caribe Colombiano, 2008
2. Epístolas a Adriano, 2007.
3. Odas a la Inmortalidad, 2007
4. Visiones de Mundo del poemario Rostro en la Soledad de Héctor Rojas Herazo, 2007.
5. Poemas a Paris, 2005.
6. Espíritu de Amor, 2003 POEMAS.
7. Realidades y Utopías, 2000 POEMAS.
8. Antología de Traducciones sobre Textos Musicales, 1998.
9. Carta a Alexis, 1997 EPÍSTOLA.
10. Nocturnos Y Ditirambos, 1997 POEMAS.
11. Cuadros de un Amor Cíclico, 1996.
12. Compendio Metodológico de Canciones Caribeñas Armonizadas para coro Infantil, 1995 MÚSICA.
13. Remembranzas Estivales, 1995.

Actualmente realiza investigaciones sobre:
Strauss y Wilde: Relaciones Música y Texto en la ópera Salomé.
OSCAR WILDE, El genio del arte y de la vida
Debussy y Strawinsky, y sus nexos con el pasado.

diana_pedrosa@yahoo.com
www.bellvigraf.com.ar/escritores/pedrosa_cadena_diana.htm